La colorimetría es la ciencia que estudia la medida de los colores y que desarrolla métodos para la cuantificación del color, es decir la obtención de valores numéricos del color.
El color se puede percibir. El
matiz es el estado puro del color: rojo, amarillo, azul... La
saturación de un color es su grado de pureza. Un color está más saturado cuanto menor sea su contenido de grises o de blancos. Los colores de la naturaleza siempre son más o menos saturados. La
intensidad o
luminosidad de un color, es la característica que hace que este aparezca más claro, independientemente de su saturación.
El estudio del círculo cromático nos permite entender las características de los colores al combinarse, a esto le llamamos
colorimetría.
Este estudio es llevado a cabo teniendo en cuenta nuestra piel, cabello, ojos, cejas y el contraste que se observa entre estos elementos. La idea es sacarle provecho a nuestro rostro y tomar los colores que nos favorecen y nos hacen lucir resplandecientes.
El diagnóstico nos dirá qué tipo de piel tenemos, discriminando entre fría y cálida. Dentro del primer grupo, encontramos invierno y verano. Por otra parte, en las pieles cálidas encontraremos primavera y otoño.
Para diferenciar a una persona tendremos en cuenta el color de la piel, el color del cabello natural, las cejas y los ojos (el iris y la esclerótica).
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OTOÑO |
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INVIERNO |
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PRIMAVERA
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VERANO |
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